Cleansing

En cosmética hay pocas cosas en las que no hay discusión y una de ellas es la importancia de la limpieza de la piel. Acto imprescindible para tener una piel bonita y sana. Y como siempre, lo importante es elegir el tipo de limpiador que le va bien a tu piel.

Recomendamos una limpieza en dos fases: uno para retirar adecuadamente el maquillaje, de fase oleosa (aplicando el aceite seco regenerador) y seguidamente se debe aplicar un limpiador de fase acuosa (aplicando el jabón, gel o crema limpiadora, según el tipo de piel y la acción que estés buscando).

El jabón dermatológico va dirigido a pieles normales, secas, sensibles y delicadas, mientras que el gel dermatológico está formulado para pieles mixtas, grasas, con tendencia acneica y/o a la queratinización.

Por otra parte, la crema limpiadora te va a proporcionar, además de una limpieza profunda, una suave exfoliación, minimizando el tamaño del poro y equilibrando la microbiota por su contenido en prebióticos.